El inspector de paisano

Desde siempre se ha insinuado que Vitrasa tiene inspectores de paisano. Es decir, que aparte de los inspectores uniformados que tanto valen para un roto como para un descosido (control de billetes, vigilar las manifestaciones y cuando hay que desviar los vehículos- ¿el inspector cuenta como manifestante cuando se hacen las cuentas? -, controlar que los vehículos no se llenen demasiado en los días de playa y fiestas y pedir refuerzos...), hay inspectores de paisano.

Estos inspectores de paisano tendrían la única función de vigilar lo que pasa en los autobuses y el cumplimiento de las normas, dado que cuando el superior no mira, el superior no ve. Esta figura es común en la policía, existen policías de paisano circulando a diario, para que se cumplan las normas aunque el poli no esté delante. En las grandes superficies las marcas suelen traer clientes de paisano para vigilar el trato que reciben sus productos e incluso grandes empresas suelen enviar clientes de paisano a sus establecimientos para vigilar la atención al cliente.

Por ahora no se tienen pruebas de su existencia, e ignoramos si la legalidad vigente permite este tipo de prácticas en empresas dedicadas al transporte de viajeros. Si no es legal, entonces sinceramente, pienso que no existen, pero si es legal... puede ser que sí o puede ser que no. Es decir, ese viajero cuyos patrones de viaje son un poco extraños igual es un inspector de paisano...o igual es alguien con patrones de vida distintos al común de los mortales, o solo está de paseo, o tendrá motivaciones distintas para subirse y bajarse en determinados sitios.

En resumen, pienso que los inspectores de paisano no son más que un simple bulo, dada la inexistencia ni de pruebas ni tan siquiera de indicios que lo avalen.